CHAPTER # 08 – Reunión de viejos amigos.
PARTE 2
La misma noche de la visita de Fubuki a la casa de Endou, Tobitaka organizó una pequeña reunión en el restaurante con motivo de buscar opciones para darle algo de ánimo a su viejo capitán.
- ¡Aquí, Fubuki! – llamaba Haruna en una esquina mientras alzaba la mano –
Él sonrió mientras cruzaba la calle para llegar con ella…
- Gracias por llamarme, creo que me estaba perdiendo – dijo algo jocoso –
- Descuida, lo supuse – dijo ella mientras comenzaba a caminar y el la seguía – siempre que vienes no te das el tiempo para conocer mejor la ciudad – le dijo –
- ¿Eso es un regaño? – preguntó curioso –
- No lo sé – contestó volteando a verlo algo seria – aparte ya no me escribes tan seguido –
- Lo siento, pero he tenido algo de trabajo extra – dijo el joven – pero eso no quiere decir que no me acuerde de ti – sonrió –
- Supongo que debería creerte – repuso haciendo puchero –
- No es mentira – reclamó el joven algo apenado – de hecho, siempre lo hago –
- Entonces ¿me prometes no perderte de nuevo? – dijo ella mientras se le acercaba muy seria y lo tomaba del brazo con fuerza –
- Claro, te lo prometo – dijo algo intimidado – no hay necesidad de ser tan agresivos – añadió señalando su brazo –
- Bien, nos vamos – dijo ella algo feliz sin soltarlo –
- Cuando se acabe la reunión quiero preguntarte algo – dijo él con la mirada gacha –
- ¿Por qué no lo preguntas ahora? – inquirió ella –
- Mejor después – dijo Fubuki siguiendo el paso – seguro que somos los únicos que faltamos –
- No creas, - dijo Haruna – los llamé a todos, pero al final algunos no vendrán –
- ¿Y eso? –
- No lograron conseguir permiso para ausentarse – respondió –
El joven asintió y así siguieron el camino hasta llegar al restaurante….
- Casi no llegan – decía Kidou al verlos entrar –
- ¿En qué andaban par de tortolitos? – preguntó con cierta picardía Kogure –
- ¡En nada! – dijeron los aludidos algo ruborizados –
- ¡Kogure! – dijo Haruna molesta –
En eso se acerca Kidou y separa a los recién llegados…
- Espero que sea cierto que no hay nada – dijo algo amenazante el hermano mayor mientras rodeaba con su brazo el cuello de Fubuki –
- ¿Nada de qué? –
- No te hagas el tonto – repuso apretando un poco el brazo – seguro eres el mismo de cuando éramos chicos - recordó –
- Auch. Eso era antes – dijo el joven algo ofendido – aparte, era un niño, he cambiado sabes –
- Me alegra escuchar eso – dijo mientras lo soltaba –
- Sabes, me alegra saber que estás bien – dijo Fubuki cambiando el tema – me preocupé un poco cuando tu hermana me contó lo que te pasó –
- Al principio fue duro – admitió serio el de gafas mientras se sentaba – pero no podía quedarme a llorar en los pedazos –
- Sí, tienes razón – dijo el otro mientras lo miraba – aunque no me parece justo que te hayan hecho eso –
- Últimamente nada es justo – dijo Kidou – y ninguno de nosotros puede hacer nada por él, eso es algo que me molesta – decía apretando los puños –
- Natsumi-san me dijo que ha estado muy deprimido – comentó Fubuki mientras se sentaba al frente del estratega – eso no es bueno, puedo tener una idea de cómo se estará sintiendo – dijo algo triste -
- Al parecer todos sentimos lo mismo – dijo mientras extendía su mano frente al peli plata –
- ¿Eh? –
- Préstame tu celular un momento – dijo de repente –
- Claro, - dijo extrañado mientras se lo entregaba –
- Te daré mis nuevos números y cuentas, - dijo serio –
- Si era por eso, solo me hubieras dicho y me los dictabas – dijo algo confuso –
- Prefiero hacerlo así – dijo mientras mantenía la mirada en la pantalla –
- De acuerdo – dijo el otro mientras no salía de su sorpresa –
En el restaurante habían llegado algunos de los amigos de Endou, no todos lograron llegar por razones de trabajo, y otros porque estaban fuera del país…
Kazemaru, Tachimukai, Tsunami, Hijikata, Someoka, Kabeyama, Fudou, Sakuma fueron parte del grupo que no pudo llegar a ciudad Inazuma, del resto todos habían acudido al llamado de Haruna…
Fue una comida sencilla, pero amena, el tema de charla de esa noche fue Endou… algunos habían intentado visitarlo, sin embargo, su mismo amigo se negaba a ver a alguien… no sabían qué hacer…incluso Kazemaru antes de viajar trató de despedirse y darle ánimos…
[Flash Back]
- No funcionó… - dijo Kazemaru algo decepcionado –
- Descuida – dijo Natsumi algo triste – no solo a ti te ha pasado – añadió –
- Quería hablarle antes de irme – dijo el – no quiero que crea que lo estamos abandonando –
- No lo va a ver así – dijo ella mientras suspiraba un poco –
- Ojalá – dijo Kazemaru mientras tomaba sus maletas – volveré apenas logré pedir un receso – dijo para despedirse – mientras estaré al tanto –
- Gracias – dijo la pelirroja –
[Fin de Flash Back]
Las cosas solo empeoraban con los días, todos debían regresar a sus vidas sin excusas. Todos debían seguir su camino…
- Y ni hablar de los chicos – decía Haruna algo triste –
- ¿Qué les pasó a ellos? – preguntó Kogure –
- Aparte de los señalamientos que les hicieron por su entrenador – recordaba – el club no duró mucho tiempo abierto… -
- ¿Entonces lo cerraron? – intervino Fubuki –
La joven solo asintió mientras los demás tomaban una expresión algo decaída…
[Flash Back]
- ¿La clausura del club? – se preguntaban los chicos algos confusos –
- Así es – dijo el director – en este momento no es viable mantener el club abierto, nadie quiere hacerse cargo del puesto de su antiguo entrenador -
- Nosotros podemos hacernos cargo – dijo el capitán –
- De ninguna manera – replicó el mayor – no puede permitirles que anden sin Dios ni Ley – dijo – el club de soccer de cierra hasta nuevo aviso – ordenó tajante –
Lo que ocurrió fue el sellamiento de las instalaciones del club, ante la mirada derrotada de todos los chicos…
Todo esto aconteció 4 semanas después de la muerte de Gouenji….
[Fin del Flash Back]
En su tierra natal, el rechazo fue evidente de parte de muchas personas, pero para quienes se fueron a sus equipos extranjeros las cosas fueron un poco más llevaderas, contaban con el apoyo de sus amigos y compañeros de grupo, aparte del respaldo de su familia más cercana…
- Los chicos le dejaron una carta a Endou – dijo Haruna – espero la reciba pronto –
- Quizás le ayude a subirle el ánimo – añadió Kidou –
El grupo siguió reunido hasta muy entrada la noche, donde terminaron su reunión antes que la madrugada los atrapara en la calle…
- Me alegra haberlos visto – dijo Fubuki para despedirse –
- Es bueno verte, también – dijo el de gafas – aunque deberías hacer el intento de ir a visitar a Endou un día de estos –
- Lo tendré en cuenta – sonrió Fubuki – por ahora me voy, no puedo llegar tarde al trabajo –
- Mañana es domingo, Fubuki – dijo Haruna algo risueña – no hay necesidad que te vayas apenas amanezca –
- Supongo que tienes razón, pero solo por si acaso, - decía – no sé sabe si habrá algún retraso en el viaje –
- En fin, como ya todos se fueron – dijo ella algo seria - ¿podrías acompañarme para no irme sola? –
- ¡Haruna! – reclamó su hermano –
- No pasa nada, hermanito – dijo ella tomando del brazo al otro –
- Dame un momento – pidió Kidou llevándose al joven –
- Espera, no me veas así – dijo el peli plata algo asustado –
- Ten cuidado con lo que vas a hacer – dijo amenazadoramente – aunque no tenga tantos contactos como antes, sabré cualquier cosa que hagas –
- Te dije que no soy ese tipo de persona – reclamó algo serio –
- Solo por si acaso – dijo cruzando los brazos – te veré después – dijo para despedirse – cuídate –
- Gracias, lo mismo contigo – contesto Fubuki algo contrariado –
Luego de las sugerencias o amenazas de parte de Kidou, la pareja se fue del local…
- Eres algo sobreprotector – decía Tobitaka mientras apagaba las luces de afuera – no te parecería mejor si de verdad quedaran juntos -
- ¿Qué? –
- Al menos conoces a Fubuki de años, es mejor que cualquier desconocido – añadió su amigo – velo de ese modo –
- Quizás lo piense – repuso el castaño –
Mientras tanto, camino a casa se encontraba la espontanea pareja discutiendo…
- No me pareció no haberle dicho la verdad a Kidou – decía Fubuki algo serio mientras se dejaba llevar por su amiga –
- Mira nada más como se puso cuando te dije que me acompañaras – replico ella – y no es que estemos haciendo algo malo – dijo ella algo risueña –
Momentos después llegaron a un apartamento, allí la joven abrió la puerta e invito a pasar a su invitado…
- No me parece correcto que viniendo de tan lejos, tengas que quedarte en un hotel – dijo ella mientras le servía algo de tomar – siéntete como en casa –
- Ah…claro – dijo Fubuki mientras se sentaba algo cansado –
El tema era que Kidou no sabía que su hermana había invitado a Fubuki para que se quedara en su casa….
A la mañana siguiente, el joven despertó temprano y antes de tomar el tren de regreso a Hokkaido fue a despedirse de Natsumi…
- Al parecer tuviste una buena noche – dijo con picardía la pelirroja –
- No es nada de lo que te imaginas – dijo él algo apenado – de verdad –
- Descuida, sea como sea no le diré a nadie a menos que quieran – añadió jocosa –
- Natsumi…. – suspiró Fubuki algo pálido –
La joven madre solo comenzó a reír por la situación…
- Por cierto, Fubuki – habló nuevamente la joven –
- Te escucho –
- ¿Aceptarías ser el padrino de Tohru? – preguntó mientras lo miraba algo esperanzada –
- ¿Yo? – dijo confuso mientras se señalaba –
- Por supuesto – dijo ella mientras le tomaba las manos – eres el primero que le da un nombre a mi hijo -
- No creo ser el indicado para ser un buen padrino, aparte no vivo cerca, es más casi no hablamos…. – decía rápidamente el joven mientras se ponía algo nervioso –
- ¿Y qué? – repuso ella mientras sostenía el agarre – tu ahijado tendrá a dónde ir de vacaciones cuando esté en la escuela – sonrió –
- ¿De verdad estás segura de esto? – preguntó Fubuki tomando un respiro –
Ella asintió manteniendo su sonrisa.
Rato después Fubuki se encontraba en la estación a la espera del tren…
- ¿Está bien que me acompañes hasta aquí? –
- No pasa nada, hoy es domingo – dijo Haruna -
- Supongo que tienes razón – dijo él algo pensativo –
- ¿Ocurre algo? –
- Tengo la impresión que quieres decir algo – contestó algo intrigado –
- No es nada, seguro te lo imaginaste – respondió ella algo apenada –
- Como digas –
Momentos después el tren llegaba…
- No te olvides venir más seguido – dijo ella mientras lo despedía –
- Por supuesto – dijo Fubuki entusiasmado –
- Te llamaré si hay cambios con Endou – dijo ella –
- Claro, siempre estoy pendiente de tus llamadas – sonrió mientras subía al tren – cuídate, te avisaré apenas llegue a Hokkaido –
- Bien – sonrió ella también –
La vida comenzaba a pedirle a los nuevos engranajes que se movieran, que no se quedaran estancados mientras la espera solo conseguiría oxidar a aquellos que se encontraban dentro de los nuevos ejes, por Endou, todos debían vivir, todos debían moverse y buscar un soplo de vida que le llegara a su amigo encerrado antes que terminara devorado por completo…
Días después….
- Al fin – decía el señor Gouenji luego de leer la correspondencia - por fin podré encerrar a ese asesino –
- ¿Ya programaron la audiencia? – pregunta Yuuka –
- Así es, - respondió con cierta felicidad –
- ¿Quieres que te acompañe? –
- No quiero presionarte con este asunto, Yukka – dijo su padre – eres libre de decidir si quieres ir o no –
- De acuerdo – respondió ella asintiendo –
.......................................................................................
- La audiencia es la próxima semana – decía el señor Raimon algo preocupado –
- Entonces debo hablar con Endou-san pronto – dijo el abogado –
- Es hora de comenzar a ser visibles – dijo el mayor –
- Veré si puedo visitarlo mañana mismo – dijo Yoshikawa – no podemos perder el tiempo y menos ahora que vamos contra reloj –
Todos se preparan para el primer asalto de esta lucha desigual…
PARTE 2
La misma noche de la visita de Fubuki a la casa de Endou, Tobitaka organizó una pequeña reunión en el restaurante con motivo de buscar opciones para darle algo de ánimo a su viejo capitán.
- ¡Aquí, Fubuki! – llamaba Haruna en una esquina mientras alzaba la mano –
Él sonrió mientras cruzaba la calle para llegar con ella…
- Gracias por llamarme, creo que me estaba perdiendo – dijo algo jocoso –
- Descuida, lo supuse – dijo ella mientras comenzaba a caminar y el la seguía – siempre que vienes no te das el tiempo para conocer mejor la ciudad – le dijo –
- ¿Eso es un regaño? – preguntó curioso –
- No lo sé – contestó volteando a verlo algo seria – aparte ya no me escribes tan seguido –
- Lo siento, pero he tenido algo de trabajo extra – dijo el joven – pero eso no quiere decir que no me acuerde de ti – sonrió –
- Supongo que debería creerte – repuso haciendo puchero –
- No es mentira – reclamó el joven algo apenado – de hecho, siempre lo hago –
- Entonces ¿me prometes no perderte de nuevo? – dijo ella mientras se le acercaba muy seria y lo tomaba del brazo con fuerza –
- Claro, te lo prometo – dijo algo intimidado – no hay necesidad de ser tan agresivos – añadió señalando su brazo –
- Bien, nos vamos – dijo ella algo feliz sin soltarlo –
- Cuando se acabe la reunión quiero preguntarte algo – dijo él con la mirada gacha –
- ¿Por qué no lo preguntas ahora? – inquirió ella –
- Mejor después – dijo Fubuki siguiendo el paso – seguro que somos los únicos que faltamos –
- No creas, - dijo Haruna – los llamé a todos, pero al final algunos no vendrán –
- ¿Y eso? –
- No lograron conseguir permiso para ausentarse – respondió –
El joven asintió y así siguieron el camino hasta llegar al restaurante….
- Casi no llegan – decía Kidou al verlos entrar –
- ¿En qué andaban par de tortolitos? – preguntó con cierta picardía Kogure –
- ¡En nada! – dijeron los aludidos algo ruborizados –
- ¡Kogure! – dijo Haruna molesta –
En eso se acerca Kidou y separa a los recién llegados…
- Espero que sea cierto que no hay nada – dijo algo amenazante el hermano mayor mientras rodeaba con su brazo el cuello de Fubuki –
- ¿Nada de qué? –
- No te hagas el tonto – repuso apretando un poco el brazo – seguro eres el mismo de cuando éramos chicos - recordó –
- Auch. Eso era antes – dijo el joven algo ofendido – aparte, era un niño, he cambiado sabes –
- Me alegra escuchar eso – dijo mientras lo soltaba –
- Sabes, me alegra saber que estás bien – dijo Fubuki cambiando el tema – me preocupé un poco cuando tu hermana me contó lo que te pasó –
- Al principio fue duro – admitió serio el de gafas mientras se sentaba – pero no podía quedarme a llorar en los pedazos –
- Sí, tienes razón – dijo el otro mientras lo miraba – aunque no me parece justo que te hayan hecho eso –
- Últimamente nada es justo – dijo Kidou – y ninguno de nosotros puede hacer nada por él, eso es algo que me molesta – decía apretando los puños –
- Natsumi-san me dijo que ha estado muy deprimido – comentó Fubuki mientras se sentaba al frente del estratega – eso no es bueno, puedo tener una idea de cómo se estará sintiendo – dijo algo triste -
- Al parecer todos sentimos lo mismo – dijo mientras extendía su mano frente al peli plata –
- ¿Eh? –
- Préstame tu celular un momento – dijo de repente –
- Claro, - dijo extrañado mientras se lo entregaba –
- Te daré mis nuevos números y cuentas, - dijo serio –
- Si era por eso, solo me hubieras dicho y me los dictabas – dijo algo confuso –
- Prefiero hacerlo así – dijo mientras mantenía la mirada en la pantalla –
- De acuerdo – dijo el otro mientras no salía de su sorpresa –
En el restaurante habían llegado algunos de los amigos de Endou, no todos lograron llegar por razones de trabajo, y otros porque estaban fuera del país…
Kazemaru, Tachimukai, Tsunami, Hijikata, Someoka, Kabeyama, Fudou, Sakuma fueron parte del grupo que no pudo llegar a ciudad Inazuma, del resto todos habían acudido al llamado de Haruna…
Fue una comida sencilla, pero amena, el tema de charla de esa noche fue Endou… algunos habían intentado visitarlo, sin embargo, su mismo amigo se negaba a ver a alguien… no sabían qué hacer…incluso Kazemaru antes de viajar trató de despedirse y darle ánimos…
[Flash Back]
- No funcionó… - dijo Kazemaru algo decepcionado –
- Descuida – dijo Natsumi algo triste – no solo a ti te ha pasado – añadió –
- Quería hablarle antes de irme – dijo el – no quiero que crea que lo estamos abandonando –
- No lo va a ver así – dijo ella mientras suspiraba un poco –
- Ojalá – dijo Kazemaru mientras tomaba sus maletas – volveré apenas logré pedir un receso – dijo para despedirse – mientras estaré al tanto –
- Gracias – dijo la pelirroja –
[Fin de Flash Back]
Las cosas solo empeoraban con los días, todos debían regresar a sus vidas sin excusas. Todos debían seguir su camino…
- Y ni hablar de los chicos – decía Haruna algo triste –
- ¿Qué les pasó a ellos? – preguntó Kogure –
- Aparte de los señalamientos que les hicieron por su entrenador – recordaba – el club no duró mucho tiempo abierto… -
- ¿Entonces lo cerraron? – intervino Fubuki –
La joven solo asintió mientras los demás tomaban una expresión algo decaída…
[Flash Back]
- ¿La clausura del club? – se preguntaban los chicos algos confusos –
- Así es – dijo el director – en este momento no es viable mantener el club abierto, nadie quiere hacerse cargo del puesto de su antiguo entrenador -
- Nosotros podemos hacernos cargo – dijo el capitán –
- De ninguna manera – replicó el mayor – no puede permitirles que anden sin Dios ni Ley – dijo – el club de soccer de cierra hasta nuevo aviso – ordenó tajante –
Lo que ocurrió fue el sellamiento de las instalaciones del club, ante la mirada derrotada de todos los chicos…
Todo esto aconteció 4 semanas después de la muerte de Gouenji….
[Fin del Flash Back]
En su tierra natal, el rechazo fue evidente de parte de muchas personas, pero para quienes se fueron a sus equipos extranjeros las cosas fueron un poco más llevaderas, contaban con el apoyo de sus amigos y compañeros de grupo, aparte del respaldo de su familia más cercana…
- Los chicos le dejaron una carta a Endou – dijo Haruna – espero la reciba pronto –
- Quizás le ayude a subirle el ánimo – añadió Kidou –
El grupo siguió reunido hasta muy entrada la noche, donde terminaron su reunión antes que la madrugada los atrapara en la calle…
- Me alegra haberlos visto – dijo Fubuki para despedirse –
- Es bueno verte, también – dijo el de gafas – aunque deberías hacer el intento de ir a visitar a Endou un día de estos –
- Lo tendré en cuenta – sonrió Fubuki – por ahora me voy, no puedo llegar tarde al trabajo –
- Mañana es domingo, Fubuki – dijo Haruna algo risueña – no hay necesidad que te vayas apenas amanezca –
- Supongo que tienes razón, pero solo por si acaso, - decía – no sé sabe si habrá algún retraso en el viaje –
- En fin, como ya todos se fueron – dijo ella algo seria - ¿podrías acompañarme para no irme sola? –
- ¡Haruna! – reclamó su hermano –
- No pasa nada, hermanito – dijo ella tomando del brazo al otro –
- Dame un momento – pidió Kidou llevándose al joven –
- Espera, no me veas así – dijo el peli plata algo asustado –
- Ten cuidado con lo que vas a hacer – dijo amenazadoramente – aunque no tenga tantos contactos como antes, sabré cualquier cosa que hagas –
- Te dije que no soy ese tipo de persona – reclamó algo serio –
- Solo por si acaso – dijo cruzando los brazos – te veré después – dijo para despedirse – cuídate –
- Gracias, lo mismo contigo – contesto Fubuki algo contrariado –
Luego de las sugerencias o amenazas de parte de Kidou, la pareja se fue del local…
- Eres algo sobreprotector – decía Tobitaka mientras apagaba las luces de afuera – no te parecería mejor si de verdad quedaran juntos -
- ¿Qué? –
- Al menos conoces a Fubuki de años, es mejor que cualquier desconocido – añadió su amigo – velo de ese modo –
- Quizás lo piense – repuso el castaño –
Mientras tanto, camino a casa se encontraba la espontanea pareja discutiendo…
- No me pareció no haberle dicho la verdad a Kidou – decía Fubuki algo serio mientras se dejaba llevar por su amiga –
- Mira nada más como se puso cuando te dije que me acompañaras – replico ella – y no es que estemos haciendo algo malo – dijo ella algo risueña –
Momentos después llegaron a un apartamento, allí la joven abrió la puerta e invito a pasar a su invitado…
- No me parece correcto que viniendo de tan lejos, tengas que quedarte en un hotel – dijo ella mientras le servía algo de tomar – siéntete como en casa –
- Ah…claro – dijo Fubuki mientras se sentaba algo cansado –
El tema era que Kidou no sabía que su hermana había invitado a Fubuki para que se quedara en su casa….
A la mañana siguiente, el joven despertó temprano y antes de tomar el tren de regreso a Hokkaido fue a despedirse de Natsumi…
- Al parecer tuviste una buena noche – dijo con picardía la pelirroja –
- No es nada de lo que te imaginas – dijo él algo apenado – de verdad –
- Descuida, sea como sea no le diré a nadie a menos que quieran – añadió jocosa –
- Natsumi…. – suspiró Fubuki algo pálido –
La joven madre solo comenzó a reír por la situación…
- Por cierto, Fubuki – habló nuevamente la joven –
- Te escucho –
- ¿Aceptarías ser el padrino de Tohru? – preguntó mientras lo miraba algo esperanzada –
- ¿Yo? – dijo confuso mientras se señalaba –
- Por supuesto – dijo ella mientras le tomaba las manos – eres el primero que le da un nombre a mi hijo -
- No creo ser el indicado para ser un buen padrino, aparte no vivo cerca, es más casi no hablamos…. – decía rápidamente el joven mientras se ponía algo nervioso –
- ¿Y qué? – repuso ella mientras sostenía el agarre – tu ahijado tendrá a dónde ir de vacaciones cuando esté en la escuela – sonrió –
- ¿De verdad estás segura de esto? – preguntó Fubuki tomando un respiro –
Ella asintió manteniendo su sonrisa.
Rato después Fubuki se encontraba en la estación a la espera del tren…
- ¿Está bien que me acompañes hasta aquí? –
- No pasa nada, hoy es domingo – dijo Haruna -
- Supongo que tienes razón – dijo él algo pensativo –
- ¿Ocurre algo? –
- Tengo la impresión que quieres decir algo – contestó algo intrigado –
- No es nada, seguro te lo imaginaste – respondió ella algo apenada –
- Como digas –
Momentos después el tren llegaba…
- No te olvides venir más seguido – dijo ella mientras lo despedía –
- Por supuesto – dijo Fubuki entusiasmado –
- Te llamaré si hay cambios con Endou – dijo ella –
- Claro, siempre estoy pendiente de tus llamadas – sonrió mientras subía al tren – cuídate, te avisaré apenas llegue a Hokkaido –
- Bien – sonrió ella también –
La vida comenzaba a pedirle a los nuevos engranajes que se movieran, que no se quedaran estancados mientras la espera solo conseguiría oxidar a aquellos que se encontraban dentro de los nuevos ejes, por Endou, todos debían vivir, todos debían moverse y buscar un soplo de vida que le llegara a su amigo encerrado antes que terminara devorado por completo…
Días después….
- Al fin – decía el señor Gouenji luego de leer la correspondencia - por fin podré encerrar a ese asesino –
- ¿Ya programaron la audiencia? – pregunta Yuuka –
- Así es, - respondió con cierta felicidad –
- ¿Quieres que te acompañe? –
- No quiero presionarte con este asunto, Yukka – dijo su padre – eres libre de decidir si quieres ir o no –
- De acuerdo – respondió ella asintiendo –
.......................................................................................
- La audiencia es la próxima semana – decía el señor Raimon algo preocupado –
- Entonces debo hablar con Endou-san pronto – dijo el abogado –
- Es hora de comenzar a ser visibles – dijo el mayor –
- Veré si puedo visitarlo mañana mismo – dijo Yoshikawa – no podemos perder el tiempo y menos ahora que vamos contra reloj –
Todos se preparan para el primer asalto de esta lucha desigual…
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