REO CHAPTER No. 01

CHAPTER # 01 - Confuso

De una celda pasó a un centro médico, allí un oficial joven era su guardia en las más de 16 horas que estuvo en observación....

— ¿Es normal que esté así? - preguntaba el oficial al médico que lo revisaba – 

— No, su presión está muy inestable - respondió mientras escribía en una planilla -  ordenaré exámenes - dijo - 

— ¿Cuánto tardará eso? - preguntó el oficial - 

— Lo que tenga que tardar - repuso el médico algo serio - 

Un rato después, Endou fue llevado al laboratorio, allí le sacaron algunas muestras de sangre, mientras intentaban despertarlo...pero seguía igual. Fue llevado a observación allí estuvo vigilado por el mismo oficial quien le veía algo preocupado....

En eso, el policía que le interrogó primero llegaba mostrando un semblante bastante seco:

—  ¿No ha despertado aún? - 

—  No señor, al parecer es algo más complejo que un mareo - respondió el joven - 

—  ¿Cuánto piensa que le vamos a esperar? -

—  Disculpe, necesito revisar al paciente - irrumpió una enfermera - 

—  Nos lo llevaremos ahora - repuso el oficial - 

—  Se lo llevaran cuando el doctor dé la orden - devolvió la enfermera mientras revisaba su presión -

—  Pero.... - 

—  Lo siento oficial, pero debemos hacer nuestro trabajo - dijo ella - 

—  Es un trastorno momentáneo - dijo el hombre - acaba de matar a alguien, es lo normal - 

—  Pero, jefe, ellos deben seguir su protocolo - habló el joven - él apenas es un acusado - 

—  Corrección, es el homicida en persona - dijo el mayor - 

—  Antes de afirmar eso, se debe  investigar - 

—   ¿Por qué lo defiendes? ¿Eres su admirador o algo? -

—  No es eso, es solo que como todo caso, amerita una investigación justa - dijo el joven – 

—  Eres muy joven en esto, chico – dijo el mayor – hay cosas que no es necesario pensarlas tanto – 

Salió del recinto no sin antes mirar de reojo a Endou, mientras su subordinado contemplaba la escena algo molesto…

— Perdón por eso – se disculpó el joven con la enfermera – es demasiado severo con estos casos – 

— Pierde cuidado, estoy acostumbrada a lidiar pesados como él – dijo ella mientras apuntaba algunos números en una planilla – tomará tiempo para que se recupere – dijo antes de salir – no te olvides que sigue siendo un ser humano así haya caído bajo – 

— Gracias, y claro, no lo olvido – dijo el oficial – 

…………………………………

— ¿A qué se refiere con que no puedo verlo? – preguntaba una joven mujer – no importa que haya hecho, ¡él es mi esposo! – 

— Lo siento, señora, son ordenes – dijo su interlocutor – 

— ¿Qué pasará con él? – preguntó angustiada – 

— Su proceso apenas empieza – respondió serio – 

Ella dio media vuelta…. Se enteró de todo por medio de las noticias y no daba crédito a lo ocurrido….

— No pudiste haberlo hecho – decía llorando desconsolada -  te conozco y sé que caerías en eso, Mamoru… - 

En medio de dudas y aturdida por todo, salió del despacho policial….

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— ¿Qué hizo qué? – se preguntaba consternada Aki – no puede ser cierto – 

— ¿Pasa algo, Aki? – indagó Tenma al verla pálida – 

— Tenma… - susurró confusa – 

— ¿Te pasa algo? No te ves bien – seguía el chico – di algo, por favor – 

— Es horrible – dijo al fin dejando el periódico en la mesa – 

Tenma logró ver las fotografías de su entrenador y Gouenji, con un desgarrador encabezado;

“Crimen entre amigos, Gouenji Shuuya muere asesinado”

No lo podía creer, sintió que su sangre se helaba y algo en su interior se quebraba…

— Esto es una broma, ¿cierto? Aki – preguntaba al borde de las lágrimas – 

Ella negó con la cabeza, mientras comenzaba a llorar en silencio…

— No me lo creo – dijo el chico con lágrimas en los ojos – es un error, un engaño – se decía firmemente – son amigos, es imposible – 

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La escuela lo supo a primera hora; el club de futbol tuvo que ausentarse para evitar las preguntas acusadoras e implacables…en esos momentos ni siquiera ellos podían responder a sus dudas…

— ¿Qué diremos? – se preguntaba el director en medio del grupo de profesores – 

— Apenas lo supimos esta mañana – dijo el coordinador – no podemos siquiera dar una opinión al respecto a los medios – 

— No puede estar pasando – susurraba Haruna – esto es una pesadilla – 

— ¿Cómo es posible? – se preguntaban los demás profesores - ¿Quién diría que terminarían así? – 

— No se ha comprobado nada – replicó Haruna al escuchar los comentarios – 

— Ellos son tus amigos – dijo el director – en tu juicio imparcial ¿Qué opinas? – 

Ella negó con la cabeza antes de responder…

— No lo hizo… - afirmó – 

— A pesar que todo lo acusa, aun le tienes confianza – replicó uno de los profesores – pero hay que aceptar que nunca terminamos de conocer a alguien – 

— Debido a las circunstancias lo más probable es que tengamos a la policía aquí – intervino nuevamente el director – y de acuerdo a lo que pidan, la escuela estará cerrada hasta nuevo aviso – 

Todos guardaron silencio ante el comentario del director.

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La ciudad entera se seguía asombrando con el paso de las horas, los noticieros mostraban imágenes de la víctima y el victimario desde sus primeras instancias hasta lo último que se supo de ellos….

Los amigos ganados durante sus viajes y desafíos se enteraron, algunos seguían en la ciudad otros regresaron, todo era un caos, las preguntas de los periodistas no paraban y ni ellos ya sabían cómo eludir todas las arremetidas a las que se enfrentaban de parte de los medios… no tenían nada que decir, porque apenas se enteraban…

El oleaje de cámaras y micrófonos atrevidos estuvo incesante durante varios días y solo algunos lograron evitarlos, usando sus propios medios de transporte o el de amigos no conocidos por la prensa…era lo mejor…

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Con el correr de los días el malestar comenzaba a irse poco a poco, sus sentidos volvían a recobrarse, mantenía sus ojos cerrados fuertemente y recordaba vagamente sus últimas horas de actividad, los espacios en blanco de su mente, en sus recuerdos. Aun sentía pesadez pero tenía más que claro que su vida se iba a pique; su amigo fue asesinado y él era el único al que señalaban por ello…

No había visto a nadie de sus conocidos en todo el tiempo que había transcurrido, no sabía si lo apoyaban  o no, apenas y podía pensar ordenadamente y su cuerpo comenzaba de nuevo a estar coordinado.

— ¿Se encuentra bien? ¿Puede oírme? – preguntaba la voz de un hombre – 

Asumiendo su bizarra realidad, abrió en par los ojos para ver a su interlocutor; un hombre casi de su misma edad, contemporáneo, vestido con un uniforme policial que le miraba a la espera de una respuesta….

— ¿Esto es? – preguntaba Endou tratando de levantarse – 

— Quédese acostado – dijo el hombre algo serio – es mejor que mi superior no lo vea recuperado – añadió algo decaído – 

— ¿Por qué? – indagó mientras hacía caso mecánicamente – 

— ¿Recuerda qué pasó? – preguntó el oficial mirando a la puerta – 

— No mucho… - dijo desalentado – Gouenji está muerto….lo asesinaron… - 

— Y todo lo acusa a usted – dijo el otro – 

— Lo sé, entre lo poco que puedo recordar es que estaba con él…tenía un arma…pero no lo hice… lo juró – 

El oficial le quedó viendo perplejo…

— ¿Qué ganaría con eso? – siguió hablando afligido – es una tontería pensar en eso, no lo hice, jamás le dispararía a nadie no importa que haya pasado… - 

— Aunque puedo decir que estoy de acuerdo con eso, por muchas cosas, allá afuera muchos quieren su cabeza – dijo el oficial mirando unas notas – 

Aquellas palabras le helaron la sangre, no supo qué decir, simplemente agachó la cabeza y cerró los ojos mientras exploraba tontamente con sus manos la cama donde estaba acostado…

— Si soy tan peligroso – dijo al fin – deberían tenerme esposado o algo – 

— No lo vi necesario – respondió su guardia – usted está enfermo en este momento, no representa una amenaza para nadie – 

— Gran cosa…. -  dijo con un evidente tono de derrota – 

El infierno apenas comenzaba…