El para Ella y Ella para El - Chapter 10

EL PARA ELLA Y ELLA PARA EL

CHAPTER 10

El peli plata apenas comenzaba a notar su estado, cansado, preocupado y ya herido en menos de lo esperado, en su mente nunca había existido la posibilidad de terminar así y mientras más vueltas le daban al asunto, solo imaginaba cosas peores…

- ¡No te escaparás así de rápido! – replicaba Kumazaki molesto – puede ser todo lo veloz que quieras pero no creo que coordines con tu brazo así, cierto –

- ¿Acaso se dio cuenta? – pensó Fubuki –

- ¿Qué? Es obvio, tu expresión lo dice todo – decía con aire triunfante –

El más joven se enderezó un poco y siguió alejándose mientras sostenía su brazo procurando no moverlo mucho para no provocar más dolor del que tenía…

- Maldito mocoso entrenador… replicaba el otro apretando sus puños -

Sin pensarlo mucho Kumazaki decidió acelerar sus pasos y atrapar de una vez por todas a Fubuki, objetivo que logró al tomarlo de la chaqueta y zarandearlo violentamente, hasta estrellarlo contra la pared…

- Yo gané – decía riendo el mayor –

- ¿Qué ganas haciendo esto? – interrogó algo desubicado el peli plata –

- Nada en absoluto, que sea material – decía – solo la satisfacción de verte así – terminó diciendo mientras sus mirada se tornaba oscura –

Fubuki aprovechando un ligero descuido de su agresor, lo pateó, seguidamente se compuso un poco y empezó a buscar un punto de salida, al tiempo que sus estudiantes del club lo buscaban… a pesar de la fuerte voluntad que tenía de salir de aquella situación, su cuerpo comenzaba a tener los estragos de toda una jornada de trabajo…

- ¡Sempai! – llamaba el joven algo apresurado viendo como toda la escuela estaba desordenada –

- Tiene que estar por acá, no creo que haya ido lejos – decía Makari –

- La cuestión es ¿dónde? – cuestionaba otro –

Mientras pensaban en una cantidad de lugares, un estruendo proveniente del salón cercano al evento los hizo sobresaltar…

- No puede ser… -

Mientras tanto…

Cierto que es horrible que ahora sea la situación sea al revés – decía Kumazaki al tiempo que buscaba al peli plata – sabes me sentí contra la pared, cuando por ti y tu amigos me echaron, dañaron mi imagen en ese partido -

- Este tipo… - decía Fubuki –

Seguía alejándose más, pero para su mala suerte, aquella persona logró verlo y ante su rabia, se trato de abalanzar sobre el más joven, quien por evitarlo, retrocedió sin mirar atrás, tropezándose irremediablemente para luego rodar por las escaleras que allí habían…perdiendo la consciencia casi de inmediato, mientras yacía en el suelo, totalmente indefenso.

- Fubuki-san…. – dijo Shirosaki al voltear y encontrarse con aquella escena –

De inmediato, corrió hasta llevar al lugar dónde quedo el peli plata…

- ¡Vamos, resiste! – replicaba el chico mientras lo revisaba – abre los ojos –

La siguiente que hizo el chico fue examinar al mayor, valiéndose de los conocimientos básicos que tenia sobre primeros auxilios, comprobando que habría heridas internas, solo cuando tocó el brazo izquierdo del mayor, fue que encontró la primera lesión de consideración;

- No puedo creerlo, su brazo está roto – decía mientras escuchaba nuevamente a Kumazaki gritar como loco – esto de verdad, ha llegado demasiado lejos –

Shirosaki, movió cuidadosamente al peli plata, para tratar de ocultarlo, mientras buscaba con la mirada a sus viejos compañeros d equipo…

- ¿Dónde rayos están? – preguntaba impaciente – se supone que deberían de estar cerca, están que matan a su entrenador - decía algo serio –

- ¿En dónde está? – se escuchaba Kumazami quien había bajado – me facilitaste las cosas, mira que irte escaleras abajo, será más rápido arreglar cuentas contigo –

Yukimura y los demás chicos, llegaron al lugar, encontrándose de lejos con su ex – entrenador, ya sulfurado y mirando a todos lados…

- Pero… ¿en dónde está sempai? –

- ¿Será que le paso algo? –

- No perdonaré a ese tipo, si le hizo algo – replicaba el joven aprendiz –

- Ya era hora que se aparecieran – decía Shirosaki apareciendo frente a ellos con los brazos cruzados –

- ¿Tú? ¿qué haces aquí? – indagaba uno de los chicos –

- No les interesa – replico el otro secamente – más bien, por qué vienen hasta ahora –

- El entrenador nos dejó encerrados – dijo Makari – no fue fácil salir –

- Ya entiendo – decía sonriendo un poco – entonces era por eso que estaba solo, que manera tan arriesgada de hacer las cosas –

- ¿Sabes en donde está Fubuki-sempai? –

El aludido solo asintió ligeramente…

- ¿Se encuentra bien? –

- Solo les diré que sigue con vida – dijo al fin el chico – si quieren verlo, primero tendrán que detener al maniático que grita –

- ¿Qué quieres decir con eso que sigue con vida? – preguntaba Yukimura –

- Deberías entenderlo – repuso el otro – en este momento, no está en condiciones de enfrentarse a ese tipo –

La cara de espanto de todo el equipo no dio espera;

- No es cierto… -

- Descuiden, ya les dije que está vivo – dijo serenamente –

- ¡Voy a detener a Kumazaki! – replicó Yukimura molesto mientras comenzaba a avanzar –

- Entonces ¿harás lo mismo que tu maestro? – dijo Shirosaki interponiéndose – irás tu solo y medirás fuerzas, acabarás igual o peor –

- ¡No me fastidies! ¡Hazte a un lado! – exclamó enojado –

- Escucha, tu querido maestro, está demasiado herido como para que tu ahora lo quieras acompañar – decía el otro tratando de aplacar el impulso de Yukimura – logré esconderlo un poco pero a este paso, lo encontrará y lo matará, si no hacemos algo, ahora te pregunto, ¿quieres ayudarlo? –

El chico quedó en silencio unos instantes ante las palabras de Shirosaki…

- ¿Dónde está? – preguntó más calmado –

- Por ahora está seguro - respondió - ¿tienen algo en mente para enfrentar ese tipo? –

- ¿No deberíamos llamar a la policía? –

- Ellos siempre llegan tarde – repuso Shirosaki –

- Lo detendremos usando nuestro modo de juego – dijo Yukimura algo serio –

- Perdona que te lo diga, pero no estamos en un partido – cuestiono uno de los chicos –

- No estoy diciendo que lo estemos – replico el chico – estoy diciendo que usaremos eso para detener a Kumazaki, solo debemos sacarlo de aquí, ¿cierto? – volteo a ver a Shirosaki –

- Si es lo que quieres, por mi está bien – respondió el aludido – les ayudaré –

El grupo de chicos hizo un circulo y discutió acerca del paso a seguir antes de encarar a su ex –entrenador y evitar que continuará provocando daños….

- ¡Bien! Solo será hasta que llegue la policía – decían –

- Si es que llega –

- ¡Basta Shirosaki! ¡Por supuesto que llegaran! – replico uno –

Unos momentos después volvieron a escuchar la voz de aquel hombre, sonaba molesto mientras golpeaba todo lo que se le cruzaba… con una mirada serena los chicos terminaron de pactar sus actos.

- Tiempo sin verlo, entrenador – saludaba sarcásticamente Yukimura –

- ¿Qué hiciste con tu maestro? – indagaba – es obvio que le estas ayudando a huir –

- ¿En serio? –

- ¡No me tomes del pelo! – grito molesto – me dirás ahora mismo dónde está, lo encontraré y podrás irte tranquilo -

- Interesante oferta – dijo Yukimura – pero es como si ofrecieras un dulce a un bebé –

- Tú…. –

En ese instante se ve la trayectoria fugaz de un balón que va hacia el chico, lo atrapa y respira hondo…

- No voy a dejar que sigas lastimando a mi maestro – sentencia mientras pateaba fuertemente - ¡todos es hora! – anunció para luego ver como un grupo de ellos comenzaban a aparecer en varias direcciones del lugar –

- ¡¿Pero qué?! - se preguntaba exaltado el mayor - no crean que caeré en sus tontos jueguitos –

- ¿Quién dijo que esto es un juego? – decía Makari –

- Vamos en serio – confirmo otro de los chicos –

- Ah… ustedes, aún recuerdo lo hicieron en ese partido…. –

- Es cosa de pasado y no te da derecho a venir aquí y agredirnos – sentencio Yukimura – no vamos a perdonarte por lo que acabas de hacer –

- Si quieren hagan una ronda – amenazaba el mayor – no podrán conmigo –

- Eso lo veremos – dijeron todos al tiempo –

La formación del equipo tomo lugar de inmediato, rodeando al mayor hasta no dejarle más salidas, por ello se molestaba pues en su mente solo estaba encontrar a Fubuki terminar su asunto tan pronto le fuera posible…

Mientras tanto en la ciudad Inazuma…

Haruna y Kidou se encontraban alistando su viaje cada uno por su lado, irían en avión, saliendo prácticamente apenas despuntara el sol.

La prisa en ellos era evidente y ninguno de los dos tenía tranquilidad, Haruna temía porque algo muy grave pasara con Fubuki sin estar ella presente para ayudarle, le dolía verse en esa situación…

- Shirou… - decía mientras suspiraba un poco –

En eso sonaba el teléfono de la sala;

- ¿Diga? – contestó la peli azul - ¿Hermano? ¿ocurre algo? –

- No es nada solo quería saber cómo va todo - decía a través de la línea –

- Bien… supongo – contesto ella – estaré mejor cuando me llame Shirou –

- ¿Te llama? –

- Claro, todas las noches – dijo sonriendo - me da las buenas noches –

- Entiendo – respondió - bueno apenas te llame házmelo saber –

- ¿Eh? –

- Así sabré que todo está bien –

- Claro, claro - decía ella riendo – pensé que querías molestarlo de nuevo –

- Vamos, no siempre seré un ogro para tu esposo – decía él mitigando un sonrisa –

- Eso creo también, deberías verlo como otro hermano para ti – rió ella –

- Ya lo veremos – dijo el de gafas – te llamaré luego –

- De acuerdo – respondió ella colgando –

Aunque no le haya comentado nada a su hermano, Haruna se sentía algo inquieta desde hacía un rato, luego de haber visto una foto de Fubuki que estaba en el apartamento.

- Solo serán cosas mías – se decía mientras se frotaba la cara – mañana te veré y seguro dejaré de preocuparme tanto -

Hokkaido

7:25 pm

La afrenta de los chicos, habían rodeado a Kumazaki sin darle opciones de escabullirse por algún sitio. Sin lugar a dudas el esfuerzo de los chicos comenzaba a dar frutos tanto así que lo siguiente que oyeron fueron las sirenas de los autos de la policía…

Habían tardado sí, pero al menos lograrían detenerlo antes que se fuera, al darse cuenta que habían llegado refuerzos giro dando unos atrás para intentar huir por la parte trasera del auditorio; cosa que no fue permitida siendo capturado unos momentos después de haber intentado fugarse. Los chicos solo observaban aquella escena de éste gritando y tratando de zafarse de las manos de la policía….

- ¿En dónde está sempai? – volvió a preguntar Yukimura –

- Allí – señalo Shirosaki – ve con él, yo llamaré a una ambulancia –

- ¿Así de grave como para que tenga que ir al hospital? – preguntaba otro chico –

- Supongo – respondió mientras se iba alejando – tengan cuidado con él – terminó diciendo –

- Yukimura – dijeron los demás –

- Vamos a ver como se encuentra – decía el chico pensativo – también debemos avisarle a Haruna-san -

El grupo de chicos fue en busca de su entrenador, quien se encontraba semi-consciente en el suelo, su expresión era algo cansada pero a la vez denotaba algo tranquilidad…

- ¡Sempai! – Exclamo el chico al verle mientras se agachaba - ¿cómo terminaste así? – preguntaba asustado mientras le tomaba la mano – oye di algo –

El mayor solo abrió los ojos pesadamente, encontrándose con las miradas de preocupación de los chicos, tomó aire y se limito a sonreír primeramente…

- Es bueno que estén bien – decía pausadamente –

- ¡Cómo puedes decir eso! Mírate, ¿qué fue lo que sucedió contigo? – cuestionaba Yukimura un poco serio –

- Su brazo no luce nada bien – decía otro chico reparando un poco al mayor –

Momentos después llegaron dos paramédicos al lugar, uno de los estudiantes le indicó el lugar y llegando enseguida… lo siguiente que vieron los chicos fue como Fubuki era llevado a la ambulancia rápidamente.

- ¿Tienes algún número para avisarle a su esposa? – preguntaban a Yukimura –

- ¿Eh? –

- Eres más cercano a ellos – dijo Makari –

- Cierto… creo que lo tengo – dijo algo apagado el chico – me pregunto cómo lo tomará Haruna- san – decía al grupo mientras comenzaba a caminar lentamente – Sempai… -

FIN CHAPTER 10